sábado, 2 de octubre de 2010

El fenómeno Raemon

The New Raemon ya llegó hace un tiempo a la categoría de fenómeno. Tiene un público amplio, variado, creciente y fiel. Intuyo que sus discos se venden bien, hay personas vestiendo camisetas con su cara. El hombre toca y toca (me pregunto si no se cansa) y nosotros vamos y vamos. Llena páginas incluso en los medios generalistas, gracias en gran parte a Nando Cruz y El Periódico, artículos en los que se ve la simpatía del periodista por él (pero mola mucho).

¿Cuál es el secreto de su éxito? Sería que estábamos sedientos de canciones hermosas, dramáticas y coreables. De una voz envidiable que no es habitual en los grupos indies. Será que parece un tipo corriente, simpático. Será que coge cualquien canción, la versiona y siempre le sale bien la jugada. Será que se ríe de él mismo, que le da importancia al directo. Sea como sea, los hombres quieren ser su amigo o parecerse un poco a él; las mujeres querrían consolarle en las canciones tristes.


Raemon protagonizaba ayer un nuevo concierto En Persona. El ciclo en sí no me parece gran cosa, porque sigo pensando que vamos a un concierto a lo que vamos: a ver y escuchar música. Ayer tuvo su gracia porque Ramon Rodríguez es un tipo simpático que da juego, aunque eso ya lo suele hacer siempre en sus conciertos. Esta vez el turno de preguntas quedó mejor integrado en el show y no se hizo tan pesado. Ramon contestó a cosas como "¿dónde están las Charades" "en Madrid fumando porros", dijo; "¿dónde está el chino del oso panda?" y otras más serias tipo "¿cómo será el próximo disco?"

El concierto fue un repaso de grandes éxitos, una fiesta de entrada. Tras el set inicial salió Lluís Gavaldà para colaborar en Aquest cony de temps, la versión incluida en Epés Reunidos. Los siguientes invitados, Manos de Topo, hicieron su revisión de Sucedáneos introduciéndola con un "vamos a destrozar una canción de The New Raemon, pero la vamos a destrozar muy bien". Ramon se quedó con ellos para dar la réplica, dándoles "el toque Julio Iglesias" a Pollo Frito y No Doy la Talla.
Finalmente, salieron acompañados de una gran aclamación Maga. Con ellos Ramon hizo la mejor colaboración de la noche en La Dimensión Desconocida by Maga, con él a coros, guitarra y pandereta, y en Silencio by Ramon, sobrecogedora. Duelo de grandes voces que además cantan muy bien. Ramon también se atrevió con la bonita Astrolabios.

El concierto se hizo muy corto, estuvieron bien integradas charlas y colaboraciones, fue divertido y las canciones sonaron muy bien, como siempre pasa en los concierto de The New Raemon.

Creo que estoy en el centro del fenómeno Raemon, porque en el último año debo haberle visto una decena de veces y aún no me he cansado.






1 comentario:

littlemisscarrousel dijo...

envidia, y no empieza a ser de la sana